miércoles, 12 de septiembre de 2012

Agatha Christie


Autora inglesa del género policíaco, sin duda una de las más prolíficas y Autora inglesa del género policíaco, sin duda una de las más prolíficas y leídas del siglo XX. En 1920 pública El misterioso caso de Styles, escrito mientras trabajaba como enfermera durante la Primera Guerra Mundial, aparece el famoso investigador Hércules Poirot. En 1914 se había casado con Archibald Christie, de quien se divorció en 1928. Sumida en una larga depresión en 1937 su coche apareció abandonado cerca de la carretera, sin rastros de la escritora. Once días más tarde se registró en un hotel con el nombre de una amante de su marido. Fue encontrada por su familia y se recuperó tras un tratamiento psiquiátrico. Novelas posteriores, como Asesinato en la Mesopotamia (1930), Muerte en el Nilo (1936) y Cita con la muerte (1938).
Quizá su mejor obra es una de las primeras, El asesinato de Roger Ackroyd (1926), en la que la autora se sirvió del relato en primera persona para ocultar y al mismo tiempo revelar la identidad del asesino. Utilizó un seudónimo, Mary Westmaccot, cuando escribió algunas novelas de corte sentimental, sin demasiado éxito. En 1971 fue nombrada Dama del Imperio Británico.

Un poco de poesía romantica



                           Amor Eterno
 


            Podrá nublarse el sol eternamente;
         Podrá secarse en un instante el mar;
     Podrá romperse el eje de la tierra

     ¡Todo sucederá! Podrá la muerte
       Cubrirme con su fúnebre crespón;
        Pero jamás en mí podra apagarse 
     La llama de tu amor. 



   Gustavo Adolfo Bécquer


Arthur Conan Doyle


Novelista británico. De familia escocesa, estudió en las universidades de Stonyhurst y de Edimburgo, donde concluyó la carrera de medicina. Entre 1882 y 1890 trabajó como médico. Para mejorar sus ingresos publicó una novela de intriga, Estudio en escarlata, que se convertiría en el primero de los sesenta y ocho relatos en los que aparece uno de los detectives literarios más famosos de todos los tiempos, Sherlock Holmes.
 Se basó en Quijote y Sancho y comenzó las aventuras de el doctor Watson (médico leal) y Sherlock. En julio de 1891 empezó a publicar en la revista Strand Magazine las andanzas de su personaje, influenciado por un profesor de la universidad.
En 1893, le da muerte en la ficción, sin embargo,  en 1902 debió resucitarlo, con El sabueso de los Baskerville. Doyle adornó a su personaje con ciertos rasgos de los estereotipos de la clase alta victoriana: afición a la cocaína, destreza en la música (sobre todo con el violín), bruscos accesos de euforia y de melancolía, misoginia y, patriotismo. 
Practicó  el género histórico en Michael Clarke (1888), La compañía blanca (1890) o Rodney Stone (1896), así como el drama en Historia de Waterloo (1894). En Ciencia-ficción: The Lost Word (1912) y The Poison Belt (1913). Sufre una crisis tras la muerte de su hijo mayor en las trincheras de la Gran Guerra y se dedicó, a difundir el espiritualismo, sobre todo en The Wanderings of a Spiritualist (1921) y the History of Spiritualism (1926). 
Cuatro años antes de morir publicó su autobiografía, Memorias y aventuras.